Lunfardo, un relato de Janer Villanueva

4 años ago

En el camino, le apretaba el culo mientras la estrujaba contra las persianas de la calle Chile, sus uñas dolían bonito cuando se incrustaban en mi espalda.

Algunas huellas del Kraken

4 años ago

En el arte, como en política, cada decisión o creación va insinuando un sentido, unas influencias y un manejo personal o grupal de un tema; es decir: se evidencia la síntesis del grupo o de la persona en lo que se ha hecho.

Belleza de mujer, por Susan Sontag

4 años ago

Es una cruda trampa, y ha funcionado por mucho tiempo. Pero salir de la trampa requiere que la mujer tome cierta distancia crítica de aquel privilegio y aquella excelencia que significa la belleza.

Es el crepúsculo, sal y míralo: Cry Macho

4 años ago

Quienes admiramos a Eastwood esperamos que Cry Macho sea otro eslabón más en la prolífica vida del cineasta y no una esquela definitiva.

La desafortunada celebración de la muerte, por Eduardo Viladés

4 años ago

Mozart se encontraba en un momento muy complicado. Su salud decaía y estaba muy abatido desde el adiós de su padre.

Veinticinco años de transigir, un texto de Henry Ortiz Zabala

4 años ago

Después de cierta edad, digamos, un cuarto de siglo, lo único que haces es forjar una mueca obscena sobre tu rostro, te sale del fondo de la vida y se instala allí, en tu cara.

Apariciones marianas en tiempos de corona, un relato de Eduardo Viladés

4 años ago

Luis no es Séneca y su poder de concentración se limita al porno.

Príncipe de este mundo, un cuento de Juan Cruz López Rasch

4 años ago

Cerraba los ojos y veía cómo los agonizantes cuerpos, una vez ensartados, iban deslizándose por la madera irregular de los troncos, repleta de astillas.

Desesperanza y recursividad: escribir en Barranquilla

4 años ago

Es imposible sobrevivir al tiempo y reelaborar la historia, todo está hecho, sólo queda disfrutar el tiempo que quede mientras que la parca llegue. Más nada.

El corsé, un cuento de Carmen Cecilia Morales

4 años ago

Despertaron después del mediodía, ella tenía aún el corsé, como si este tuviera voluntad propia y se negara a abandonarla.