El Mediterráneo de Joan Manuel Serrat
La fama y el éxito fueron entonces una transición apenas natural producto de su encanto tanto personal como melódico. Su nombre se volvió un sinónimo de calidad y calidez.
Natalia Lafourcade: «Mi casa es el escenario»
Se dice que una canción es una buena melodía y una buena letra, mezclada con algo más que nadie sabe lo que es, pero que, a la larga, es lo único qué importa.