La añoranza hecha ballet, por Eduardo Viladés
A lo largo de la noche, la pequeña comprueba asombrada cómo todo a su alrededor comienza a crecer y los muñecos cobran vida. La arrastrarán a participar en divertidas y bélicas travesuras hasta descubrir un mundo mágico lleno de adorables personajes.
Pedro, un cuento de Jorge Luis Quintana Montes
Aunque era el amanecer del día previo al pago, y como ya era parte de su rutina durante los dos años que llevaba en el banco, lo motivaba el tener que afinar la vista para mirar con detenimiento el pronunciado escote de Pilar.
Monólogo del confinado, por Sebastián Grasso
Dudas. Y mientras lo haces, te dices a ti mismo que eres valiente, y que, en efecto, te lo estás tomando con calma. Pero es que ni siquiera así, dicen, estás a salvo. Porque no basta el encierro, tampoco el valor ni la paciencia.