Cine y TV

Los desafíos que podrían derrotar a The Flash

Si anteriormente has oído acerca de las aparentes filtraciones del argumento y el libreto de la película The Flash, habría que decir que varios de esos rumores eran correctos. Sin embargo, este artículo no contiene spoilers. The Flash es una producción construida con los elementos naturales de la vida de un superhéroe, por ello se centra en abordar al personaje de Barry Allen y su alter ego, sin intentar cambiar la forma de hacer cine.

Esta historia continúa tras los eventos de La Liga de la Justicia, pero la narración nos va llevando a momentos puntuales de la vida pasada de Barry Allen, un joven común que luego de un accidente se convierte en un metahumano, capaz de correr a velocidad extraordinaria. Si bien es una historia individual de este superhéroe, no termina siendo una película de origen.

La cinta tiene múltiples retos, uno de ellos es tener éxito en taquilla; aún no se sabe cuanto impacto tendrá el hecho de que el libreto se haya filtrado con semanas de anterioridad a su proyección en los cines o cuanto influirá el hecho de que este personaje ficticio todavía esté fresco en la memoria de los fanáticos, gracias a la actuación de Grant Gustin en la pantalla chica.

Los analistas dudan si The Flash tendrá éxito en taquilla, puesto que Shazam! Furia de los dioses fue un fracaso y no alcanzó a ser rentable para Warner y DC. Black Adam también sufrió la misma suerte. Una de las hipótesis se relaciona con el rechazo del público al despido de Henry Cavill de su rol como Superman por parte de Warner Bros. y como rechazo a los nuevos planes de la compañía en los que se detruiría el SnyderVerse.

Más allá del poco éxito de los filmes de DC Comics en las taquillas —en comparación con las cifras que ya ha alcanzado Marvel— esta cinta de Andrés Muschietti surge en un momento en el que hemos visto el desarrollo del mismo superhéroe en la cadena CWTV durante 9 temporadas (2014-2023), lo que se traduce en que la historia de Barry Allen ya ha recorrido suficientes tramas profundas y sustanciales en la conformación del universo DC.

Muschietti se enfrentaba al hecho de que la serie del Arrowverse había tomado argumentos del comic como: Flash Reverse, FlashPoint, Savitar, La Crisis en las tierras infinitas, de modo que el director argentino debía abordar los sucesos que los fanáticos ya conocían y hacerlos parecer como una experiencia nueva.

A favor de Muschietti

Si bien podrían encontrarse elementos similares a la serie de CWTV, el nuevo filme del velocista escarlata llega a mostrar una nueva y coherente forma de enlazarlos. La clave de ello está en los personajes que acompañan la trama: por un lado, hay una marcada diferencia entre la Supergirl interpretada por Melissa Benoist (Arrowverse) y la encarnada por Sasha Calle.

En el mismo sentido, el Flash de Ezra Miller no busca apoyarse en los amistosos científicos de S.T.A.R. Labs sino en una disfuncional Liga de la Justicia —o lo más parecido que puede encontrar a ésta última—.

El Batman de Michael Keaton no necesita dar el paso de la oscuridad hacia la luz, como si debió hacerlo el murciélago de Ben Affleck en la película Batman Vs Superman, quien consideraba la fuerza de los kriptonianos como una amenaza para la existencia humana.

The Flash por fin nos muestra a un Barry Allen con técnicas desarrolladas y movimientos útiles para el combate cuerpo a cuerpo; algo difícil de ver en La Liga de la Justicia o en el Snyder Cut, por la misma naturaleza de estos dos filmes, en donde Barry aún no había tomado el rol de superhéroe y las batallas recaían sobre Batman, Wonder Woman, Aquaman y Superman.

¿Algo más?

Ezra Miller ahora tiene la oportunidad de mostrar a un Barry Allen con matices: en principio, sigue siendo el hombre que no pierde la frescura de las películas anteriores, pero esta vez el tiempo en pantalla nos permite verle enojado, decepcionado, emocionado, triste, reflexivo, temeroso o decidido. Pese a los escándalos protagonizados por Miller durante el rodaje del filme es difícil desconocer su talento actoral.

Los cameos —que también podrían abrir múltiples puertas a interesantes crossovers— dan muestra de la riqueza fílmica de DC Comics a lo largo de 6 décadas y podría solucionar algunas dudas sobre el giro que el productor James Gunn pretende darle a la franquicia. Aunque ciertamente DC nunca ha necesitado una excusa para dar lugar a nuevas producciones basadas en sus comics, de modo que decenas de filmes y series han convivido perfectamente sin tener relación alguna.

Imágenes: Warner Bros. DC Comics.